Si esto ha llegado hasta ti será porque quizá tengas que leerlo. Las palabras son capaces de saltar cualquier barrera. Pueden llegar a ser tan profundas que en algún momento parece que nos ahogamos entre ellas. Vuelan tan alto que si nos dejamos llevar podemos subir en un sueño. Tan rápidas que nos ponen en peligro. Tantas veces tan lentas que dejan caer una lágrima. Pueden hacer sonreír o rasgar el corazón como si de una espada se tratase. Saben de amor y de odio de lealtad y de traición. Tan pronto te acarician cómo te empujan por un precipicio. Rozan la perfección de un atardecer, caminan por la blanca paz de la nieve, respiran el murmullo de las hojas en un bosque, teclean la nostalgia de quién se va. Es admirable el poder que encierran y es incalculable. ...Pero sólo son palabras. Te puedo hacer despertar mil sentimientos si las uso. Pero no sirve de nada si no quieres leerlas. Aún a...
Así te conocí tan insegura y tan profunda. ... después de muchos puntos suspensivos llegaba la respuesta y con ella una sonrisa. Es difícil explicar cómo se puede llegar a querer tanto a una persona sin apenas haber hecho cosas grandes con ella. Pero sabemos bien que las pequeñas, valoradas en su más alto grado de satisfacción, convierten ese momento en un instante mágico. Son pequeños chispazos que dejan una estela tan larga y colmada que la huella que refleja es algo más que un simple querer. No hacen falta palabras para decirte que al conocerte se inició ese camino luminoso salpicado del polvo dorado que dejan los recuerdos. Se que nunca se borrarán. ¿Y sabes cuál es el mejor regalo que puede hacerte una persona? darte la oportunidad de conocerla. Yo con esa oportunidad verifique que esa luz que apenas se percibe en ti tiene una gran fuerza transformadora: abre corazones, ilumina sueños, rectifica caminos. Una luz que de cerca te ciega. Sé que algo ha cambiado, no sé muy b...